(A aquellas mujeres que, con su bondad, siguen soportando a gente que no las trata como personas). Que se miren a sí mismas y se quieran, sobre todo.

Vida nueva

Enfrente
Bajo el sol del poste abrazado
Dormida parecía,
Quizás pensativa.

Y con todos los ojos cerrados
miraba hasta el desconcertado y oscuro lado.
Porque, cansada, lo inevitable
No evitaba, fuese corto o largo.

Escondida la cabeza que no soñaba
Entre extrañas caras
caía en el infinito blanco.

No mimada, ni mimaba
hasta esa mansa caverna
llegada desde lo interminable
de la impaciencia
que unió al desvarío.

Y oscurecía
Poco a poco.

¡Tanta fuerza la amanecida!.
La noche no olvidó
Y sin que escapara aprovechó el dia.

Durmió, soñando plácidamente
sin creer que, siempre, ese trueno intempestivo
la despertaría para quehaceres de permanente abstracción.

…Y su felicidad será otra,
caverna menos mansa donde irán amaneciendo
todas las paciencias todavía ensimismadas.